ESCUDOS, ESTANDARTES, CIRIOS Y GUIONES
Desde el primer momento la Cofradía adoptó como distintivo de la misma, una corona de espinas cruzada por una caña, símbolo de Rey de los humildes; corona y cetro. El diseño del primer escudo es obra, al parecer, de nuestro recordado D. Francisco Giménez Mateo y debió realizarse en el año 1940, ya que, al año siguiente encontramos una nota de gastos de 100 pesetas por pago a Dña. Teresa Grau Santoro por bordar 50 escudos.
El actual es original del artista oriolano, D. Fernando Fenoll y data de 1952 y se incorporó al año siguiente como distintivo de la Cofradía, acordándose el 20 de abril de 1952 que se llevara en el capirote, en su parte de la espalda. El primer escudo bordado por las monjas de las Salesas, se concluyó en septiembre de 1953, costando 125 pesetas y, ante la imposibilidad material de tener concluidos los 30 ó 35 escudos correspondientes a los cofrades que solían desfilar el Martes y Viernes Santo, se acordó visitarlos a fin de saber quién lo quería o no. El último escudo que bordaron estas monjas fue en el año 1965 y su precio se elevó a 7.500 pesetas.
Posteriormente, en los años ochenta, fueron bordados nuevos escudos por las artesanas cartageneras Dña. Fuensanta Giménez y Dña. Carmen Morales.
Dentro de los efectos procesionales la Cruz guía tiene un apartado especial, ya que en ella, confluye no solo el hecho de una joya de orfebrería y diseño, sino que también, para los cofrades representa todo un símbolo, hasta el punto de haber sido el centro de un nuevo tercio constituido en 1984 y llamado de “La Cruz” que, a los sones de diez tambores es avanzadilla del desfile de la Cofradía del Ecce-Homo, siendo sus pilares los miembros de la Junta Directiva, y actualmente varios cofrades que se han incorporado al mismo, terminando con ello los mesnaderos y cirineos pagados, distinguiéndose del resto de nazarenos al ser su túnica negra de terciopelo, el capuchón rojo cardenal, cíngulo en plata y sin capa; según diseño del cofrade D. Ricardo Cánovas Pérez. Como final diremos que en el año 1998 se dotó al Tercio de la Cruz de un cordón de seda negro del cual pende una reproducción exacta de dicha Cruz en plata, llevándola al cuello colgada todos sus miembros.
El 20 de abril de 1952 se plantea en Junta General, la intención de llevar a cabo la ejecución de nuevo estandarte. Los cofrades Sres. Mortes, Sarabia y Ballester, apuntan la posibilidad de que fuera un guión. Pero, ante las observaciones de los Sres. Galiano, Sanmartín, Rodríguez y Pérez, se acuerda realizar lo apuntado en primer lugar.
La inquietud de José Rodríguez Lozano y el interés de engrandecimiento de la Cofradía, le hace alumbrar la feliz idea de que en vez de estandarte, se ejecutara una cruz-guía. Ante ello, el 25 de julio de 1952, “encontrándola todos los reunidos como una idea original y aprovechando la estancia en la ciudad del Sr. Orrico, constructor del trono, se acuerda por unanimidad la construcción de la misma por dicho Sr., a la vista de unos bocetos presentados por el Sr. Rodríguez, la cual sería de las dimensiones siguientes: 2,80 metros de alto, 0, 20 de ancho y 0,10 de grueso, toda ella de madera de raíz de enebro con aplicaciones de plata repujada”.
Su costo fue de 10.000 pesetas y el 24 de febrero de 1953 se estaba a la espera de recibirla y, ante el peso de 33 Kg. que se indicaba que tenía, se planteaba que cuando se encontrara en Orihuela, se estudiaría la forma de llevarla.
En un principio era portada por dos cofrades, turnándose en los trayectos. Pero ello, cada vez era más dificultoso, hasta el punto que se recuerda a D. Antonio Galiano Santiago solo llevando la Cruz en la calle del Ángel, ante el hecho de no acudir el siguiente relevo y tener que continuar la procesión.
El 31 de enero de 1958, se presenta un boceto de andas para la Cruz, “una vez que va siendo cada día más difícil encontrar cofrades que la lleven gustosamente” Se planteaba la duda si perdería belleza al pasar de dos a cuatro nazarenos y D. Luis Pérez Ramos proponía él ubicarla sobre un trono, con ruedas de Vespa, aunque esto llevase un mayor desembolso. Por fin, el 31 de agosto de ese año, se acuerda enviarla a los talleres de Orrico, con objeto de que la acondicionara, y sacarla en el año 1959, para llevarla en andas de plata, quedando tal como hoy la vemos desfilar en nuestra Semana Santa. Empezaron llevándola varios cofrades por turnos rigurosos, después hubo que recurrir a “hombres pagados” y, en la actualidad, tras la creación del tercio de la Cruz, como decíamos, son los Directivos, así como varios cofrades integrados en dicho tercio, quienes la portan.
La Cruz guía desfiló por primera vez, el Martes Santo, 31 de marzo de 1953, tras haber sido bendecida el Domingo de Ramos de ese año por el Hermano Mayor, D. Modesto Díez y Zudaire, asistido por el Párroco del Salvador, D. Antonio Roda López y actuando de padrinos la Srta. Encarnación Pomares Gálvez y su hermano D. Antonio.
Con objeto de dar escolta a la Cruz, en 1962, se estrenaron dos faroles realizados en plata Orrico, con cristales esmerilados con emblemas de la pasión pintados, estos fueron sustituidos en el año 1992 por cuatro faroles de orfebrería sevillana, realizados por el orfebre de aquella capital D. Antonio Santos, pasando los primeros a escoltar el estandarte portado por el Cofrade de Honor de cada año. Los cristales de los primeros faroles, tras haberse roto por el trascurso de los años, en 1992 fueron sustituidos por unos de plástico opaco, similares a los originales, siendo copiados en los mismos los emblemas pasionarios por Dña. Marinela Benlloch Ballester.
Asimismo, la Cofradía Ecce-Homo posee tres estandartes y una bandera. El más antiguo de ellos fue realizado bajo boceto del cofrade D. Luis Boné Rogel, por D. Ignacio Genovés y su esposa Dña. Dolores Montero, en 1942, en terciopelo encarnado y el revés negro de 90 x 60 cm. de dimensiones aproximadas. Las piedras para el bordado se adquirieron en la casa V. M. Pera Martín y, el oro en el establecimiento Benjamín Martín, ambos de Valencia.
Durante muchos años, han sido este estandarte y la Cruz los únicos distintivos de la Cofradía, hasta que en 1984, por iniciativa del actual Presidente y de su Junta Directiva, se encarga la ejecución de un nuevo estandarte, según modelo de D. Balbín de la Serra, y una bandera con el escudo de la Cofradía, a las bordadoras de Cartagena, Dña. Fuensanta Giménez García y Dña. Carmen Morales, respectivamente. Con un costo total ambos de 1.025.000 pesetas. Tras haber sido bendecidos por el Hermano Mayor de la Cofradía D. Antonio Roca Cabrera, el 19 de marzo de 1985, desfilaron por primera vez, el Martes Santo de ese año.
En la Semana Santa del año siguiente, se estrenó un nuevo estandarte en forma de cruz, copia del antiguo, con un costo de 400.000 pesetas y realizado en oro fino y pedrería por Dña. Fuensanta Giménez García.
Con respecto a bordados, merece especial atención el manto del Señor del Ecce-Homo, obra muy meritoria de la primera mitad del siglo XIX y que fue restaurado y trasplantado el bordado en el año 1980, por un taller de artesanía de Lorca, gracias a las gestiones hechas por el cofrade D. Fernando Reig Serna, siendo Presidente D. Antonio Pomares Gálvez.
La Cofradía del Ecce-Homo ha dispuesto para sus cofrades de tres tipos de cirios. Los primitivos para cera, fueron sustituidos en 1946 por otros estilo renacimiento español, después de haberse acordado reformarlos “a eléctricos de pila seca”. Los actuales estrenados en 1986, son la primera representación de orfebrería andaluza en nuestras procesiones. Fueron construidos por José Amil de La Algaba ( Sevilla ) , con un costo de 15.000 pesetas por unidad. Este mismo artesano realizó las varas de los estandartes y la bandera, con un importe de 100.000 pesetas. Con posterioridad se amplió la dotación de cirios, realizados por el orfebre sevillano D. Antonio Santos.Todo el acondicionamiento de la candelería de los cirios y su montaje, ha sido labor del cofrade, D. José Bailén Rodríguez.
Siempre ha sido una inquietud de la Cofradía contar con una escolta romana, como se refleja en los albores de la misma, y por desarrollarse la acción de nuestros pasos en los Foros Romanos ante el Pretor de Palestina, así es como por fin, en el presente ejercicio se ha aprobado en Junta General Extraordinaria de fecha 29 de Octubre de 2001 y con objeto de que desfilen la próxima Semana Santa de 2002, efectuar una Guardia Pretoriana, según diseño de la Comisión de Proyectos Permanente y con el seguimiento y aprobación de la Junta Directiva, compuesta de 40 unidades con su Pretor al frente montado en una “Biga” romana, y escoltado por una guardia de honor. Para la realización de este proyecto, se autorizó a la Junta Directiva a suscribir una póliza de crédito con la Caja Rural Central.